miércoles, 22 de septiembre de 2010

"Si descendemos de los monos ¿por qué aún hay monos?"

La respuesta es sencilla: los actuales homínidos (esos "monos") descedemos de un ancestro común. Tanto gorilas, orangutanes, chimpancés y bonobos como humanos (entre otros) decendemos de un mismo antepasado. Con los orangutanes ese ancestro común es más lejano, con los gorilas lo es menos y entre chimpances, bonobos y seres humanos, menos aún. Es por ello que aún existen esos "monos" que conocemos actualmente ya que no descendemos de ellos sino que somos todos descendientes de un mismo antepasado.

Claro que Richard Dawkins lo explica mejor en este video:




Al respecto Isaac Asimov en el artículo "Mirar a un mono largo rato" -tomado de la página de SinDioses- nos hace ver que no encontramos problemas al aceptar que un tigre y un leopardo, un perro o un lobo o un cangrejo y una langosta tienen ancestros comunes. Pero si los tenemos cuando encontramos parecido entre un chimpancé y un ser humano, lo que nos lleva a pensar que existe un antepasado común del cual evolucionaron ambos. Es entonces cuando nos volvemos reacios a aceptar que somos un animal más... un ser NO creado a la imágen y semejanza de un Dios y, por lo tanto, producto de la compleja simplicidad evolutiva. Siendo así no existen fines y objetivos preestablecidos que cumplir, sino que dependemos de nosotros mismos para alcanzar nuestras propias metas que nosotros mismos nos fijamos. Eso es lo que atenta contra la creencia y es por ello que aunque la respuesta a la pregunta que titula la entrada sea lógica y sustentada, poco importará al creyente.

En ese sentido los antievolucionistas negarán, aunque tengan pruebas de la evolución del hombre, cualquier evidencia de ello. Ya nos lo hacía ver Asimov al mencionar que estos:


Se concentran única y exclusivamente en un punto: el origen del hombre. No
he recibido ni una sola carta en la que se defienda acaloradamente que el castor
no está emparentado con la rata o que la ballena no desciende de un mamífero
terrestre. A veces me da la impresión que no se dan cuenta que la evolución es
aplicable a todas las especies. Únicamente insisten en que el hombre no, no, NO
desciende de, ni está emparentado con, los simios o los monos.


Y nos advierte respecto de algunos de los argumentos utilizados por ellos como el argumento de autoridad:


Me da la impresión que los antievolucionistas abordan el tema hombre-mono de dos maneras. Pueden defender firmemente la Biblia, declarando que está redactada por inspiración divina y que en ella se afirma que el hombre fue creado por Dios a su imagen a partir del polvo de la Tierra hace seis mil años, y que no hay más que hablar. Si adoptan esta postura, está claro que sus opiniones son innegociables, y no tiene sentido intentar negociar con ellos. Con una persona así podría hablar del tiempo, pero no de la evolución.

O pretender justificar la diferencia del hombre respecto de los animales en situacioes indemostradas o indemostrables:

Un segundo camino es el que siguen los antievolucionistas que intentan encontrar alguna justificación racional para su postura; esto es, una justificación que no esté basada en la autoridad, sino que sea observable o comprobable experimentalmente y lógicamente argumentada. Por ejemplo, se puede afirmar que las diferencias entre el hombre y los demás animales son tan fundamentales que es impensable que puedan ser salvadas, y que es inconcebible que un animal se desarrolle hasta llegar a ser un hombre mediante la exclusiva actuación de las leyes de la naturaleza; que es necesaria una intervención sobrenatural.

... (constituyendo el argumento del relojero o del ajuste fino aplicado a este caso) o considerar que existe alma o que el ser humano puede diferenciar entre el bien y el mal o, incluso, que el ser humano puede hablar y sus pariente no... clic para leer lo que Asimov establece al respecto (+/-)

Los antievolucionistas no han variado en mucho desde que Asimov escribió lo anterior y es lógico ya que basándose en argumentos de autoridad o falacias nacidas de creencias de hace dos mil años o más, sus motivos para considerar que no es cierta la evolución se basan en dogmas no en hechos, las cuales son por definición inmutables.

Pese a ello la respuesta a la pregunta está dada y no hay peor ciego que quien no quiere ver. Es además una respuesta testada, con evidencias que la sustentan, pero si el creyente no la acepta nada podemos hacer por él, es un deshauciado mental respecto de la evolución del hombre ya que su propio orgullo no le permite entender que forma parte de un complejo sistema y que es el resultado de lo mejor de lo mejor, transmitido a través de los genes de esos antepasados hasta llegar a él. Por ello aquél a quien se le ha explicado la respuesta a la pregunta de ¿por qué aún hay monos? y sencillamente decide dejar de lado la evidencia y no quiere entender, no merece la inversión de un recurso tan limitado como es el tiempo... es mejor ignorarle y seguir el camino.

4 comentarios:

Jucer dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Jucer dijo...

Respetando tu modo de pensar. No creo que seamos descendencia de Un mono.Ni que nos haiga creado un Dios.Es una pregunta que jamas creo que tendra respuesta concreta.. El origen del universo....mmmm.LO unico cierto es que el ser humano es diferente de los demas animales..Somos pensantes.. Y no creo que hallamos salido de un ser no pensante como un simio. De Un Dios..Na... Son pura fantasias del ser humano por creer en algo poderoso. Es mi modo de pensar..Existimos por algo.. por algun evento natural....Puede ser que el alineamiento de los planetas del 2012... Nos de algunas respuestas.Que algo suceda en esa fecha parecido a la creacion del hombre.. quien sabe.. Saludos!!

Unknown dijo...

Entre Asimov y Dawkins se dio una respuesta magna y excelente,además de impecable.¡Bravo Dawkins,bravo Asimov!

Anónimo dijo...

Hasta ahora, NADIE, entre los que sostienen el punto de vista evolucionista, ha podido comprobar el "origen de las especies", con su argumento fundado en la evolución. TODOS se han quedado en ESLABONES PERDIDOS, sin importar la especie, el tiempo o el espacio. Tristemente, Isaac Asimov toma como "verdad" una supuesta relación entre el hombre y el mono, basando su opinión en un "ancestro común" del cual se derivan los homínidos, una fuente que NADIE ha podido comprobar. TODOS ellos parten de suposiciones.
Los invito a "(com)probar" la evolución, desde el punto de vista "científico" con argumentos sólidos, no con suposiciones. Cuidado con los pseudocientíficos que niegan la creación por la "falta de evidencia tangible," pero que basan sus aseveraciones en lo que creen, pero que tampoco pueden comprobar.
No perdamos de vista que, para que la supuesta cadena evolutiva pudiera ser cierta, no haría falta un eslabón perdido, sino millones, los cuales pudieran explicar la evolución.
Si este blog intenta ser científico, los invito a ser más serios en sus afirmaciones y no querer hacer pasar puntos de vista como verdad.
Finalmente, también los invito a CONOCER la biblia y no a interpretarla. La PALABRA es unívoca; no permitan que se tergiverse por posturas sesgadas, sin conocimiento real. Ese es uno de los grandes errores, no de la ciencia, sino de los que se intentan llamar científicos, pero que distan de serlo.
Respetuosamente,
Mizael