Evolución. Lectura recomendada: Babosadas en la enseñanza de Jack Schuster

Es refrescante ver que de vez en cuando sale algún artículo de opinión que pone los puntos sobre las íes. Resulta complicado leer algo medianamente lógico con nuestros medios de comunicación vendidos a la política, al amarillismo o al simple servilismo económico o de influencias o a las creencias, por lo que las verdades quedan relegadas a segundo plano...  en fin, este no es el caso ya que en el artículo de Jack Schuster (Universidad Del Valle de Guatemala) publicado en ElPeriódico, el escritor nos presenta sus inquietudes respecto de la forma como no sólo desinformamos sino que malinformamos a los educandos e incluso les negamos deliberadamente la posibilidad de conocer hechos científicos y sustentados con tal de mantener vigentes las creencias que los padres consideran que deben dirigir las vidas de sus hijos, ¿son nuestros hijos de nuestra propiedad?, ¿es  nuestra obligación ser objetivos en su enseñanza o debemos inculcarles creencias sin fundamento con el único fin que se vuelvan agentes repetidores de dogmas e información tergiversada?

Disfruten

Babosadas en la enseñanza

Parece que algunas personas quieren repetir la historia de lo que pasó a Copérnico y Galileo.

Jack Schuster

Como profesor universitario desde 1968 he tenido la oportunidad de observar (y cometer) varios errores en la enseñanza. Varios son simplemente accidentes.

Los que más me preocupan son los que se debieron corregir, como unos que salieron en un texto publicado en Guatemala que incluye a los caracoles dentro de los artrópodos (una babosada babosa, conchuda, es un molusco…), o una pregunta en un examen estándar para alumnos home schooled: V o F La mayoría de los insectos son malos para el ser humano. La pregunta no es mala. Pero la respuesta, según la clave, debe ser verdadera. Babosadas. Nuestra civilización no podría existir si no fuera por los insectos. ¿Qué? ¿Vamos a depender de los sapos para polinizar nuestros cultivos? (imagíneselos saltando de flor en flor). Si no fuera por los ronrones pastelófagos estaríamos hasta las orejas de pastel de vaca y de otros animales incluyendo algunos bípedos (y no me refiero a canguros, excepto en Australia, donde esto casi ocurrió con pasteles de ganado). Muchas plagas de nuestros cultivos no causan problemas debido al control biológico por otros insectos, etcétera.

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Un poco de conocimiento es una cosa peligrosa. Esto nos trae a otra babosada ejemplificada por muchas personas que no “creen en la evolución”. Algunas personas conocen suficiente biología para estar impresionadas con la belleza y complejidad de la vida sin entender qué es evolución. Creen que quiere decir que “el hombre se deriva de los monos” u otra babosada y que los científicos dicen que el origen de la vida ocurrió al azar. No decimos esto. Sin embargo, algunas personas que saben que no decimos esto siguen diciendo que sí. Esta es la peor babosada de todas, porque esta persona está engañando a propósito. Muchas personas son engañadas por estos mentirosos. Lastimosamente, algunas personas quieren ser engañadas, no pueden aceptar el parentesco de los seres humanos con otros organismos… somos demasiado especiales. Sin embargo, a veces se encuentra alguien en contra de la evolución que aparentemente tiene una mente abierta.


Recientemente, un ingeniero civil me mandó algo que él había escrito en contra de la evolución. Pedía mi crítica. Aparentemente tiene conocimiento de algunos conceptos básicos de biología celular y molecular (muy admirable para una persona tan alejada del campo de la biología). Sin embargo, no tiene entrenamiento en las bases de evolución (la verdad, aún algunos biólogos no reciben este entrenamiento, desgraciadamente). En respuesta a mi crítica no me rechazó de una vez, me pidió más información. Esta es la actitud de una persona con una mente abierta, un investigador. Él no debe aceptar mi palabra sólo porque lo digo. Una persona debe analizar por sí misma si tiene la oportunidad. Y debe tener la oportunidad, no como ocurre en una institución aquí en Guatemala donde está prohibido enseñar la evolución, según lo que oí recientemente. Parece que algunas personas quieren repetir la historia de lo que pasó a Copérnico y Galileo… Si los hechos no concuerdan con sus creencias simplemente rechazan los hechos y castigan al mensajero.


Obviamente, no todas las personas tienen las ganas de aprender tanta biología como este ingeniero civil. Van a tener que aceptar la palabra de los expertos. Muchas personas reconocen de los expertos químicos que el universo está compuesto de átomos, sin haber visto un átomo. Sin embargo, no les creen a los expertos biólogos “que han estudiado en detalle” la evolución. Hoy en día hay tanta evidencia a favor de la evolución que es irrefutable. Pero no la aceptan. ¿Por qué? A pesar de que el papa Juan Pablo II dijo que la teoría de la evolución es “más que tan solamente una hipótesis” y que la evolución es compatible con la fe cristiana (23 octubre 1996), algunas personas creen que es una conspiración contra Dios. No lo es. O contra la religión. Tampoco. Aunque, tal vez sí, en el sentido que la ciencia promociona el pensamiento independiente y analítico, y no simplemente la aceptación con base en la fe. Pero, ¡recórcholis! Los científicos rechazan otras babosadas como los platillos voladores, la telepatía, la telequinesis, los fantasmas que obviamente existen (la tía Conchita vio a uno)… así que, puede ser que estemos equivocados sobre la evolución también, ¿no? Y que la Luna esté hecha de queso verde… olvídense de los átomos… nunca he visto uno.


* Codirector del Centro de Estudios Ambientales y Biodiversidad, Universidad del Valle de Guatemala.