"Por supuesto que los errores cometidos en las instituciones y por responsables eclesiásticos son particularmente reprobables, dada la responsabilidad educativa y moral de la Iglesia, pero todas las personas objetivas e informadas saben que el tema es mucho más amplio y concentrar las acusaciones sólo contra la Iglesia lleva a falsear la perspectiva"
El caso es que tiene razón... en parte. Lombardi sólo menciona una parte del problema ya que efectivamente existen miles de pederastas que no pertenecen a la Iglesia Católica y cuyos actos, procesos penales o investigativos permanecen anónimos. Sin embargo esto no desvirtúa la necesidad de seguimiento que deben realizarse a los casos de pederastía en la Iglesia ya que:
- Muchos padres y niños creyentes confían ciegamente en la Iglesia y, en consecuencia, en los curas. Es por esto que deben de hacerse del conocimiento público que dicha institución NO está, bajo ningún punto de vista, exenta de "pecados" como ha pretendido durante siglos. Sus miembros (muchos de sus miembros) pueden ser delincuentes en ejercicio o en potencia y por ello debe hacerse consciencia que debe existir la misma desconfianza hacia un cura que hacia cualquier laico.
- En el caso de la Iglesia, no sólo es la pederastía como tal, sino el encubrimiento que ha permitido y fomentado, cambiando curas pederastas y abusadores de parroquia en parroquia y tratando que las víctimas no sean escuchadas.
Dentro de una sociedad moderna TODOS sus miembros deben ser tratados en igualdad de condiciones, cuando dichas condiciones le sean aplicables por igual. En otras palabras, se trata igual a los iguales y desigual a los desiguales. La Iglesia ha pretendido considerarse desde siempre desigual a los otros miembros del Estado... los frutos de dicha desigualdad los cosecha ahora ¿de qué se queja?
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