La RAE define embaucar: "(De embabucar). 1. tr. Engañar, alucinar, prevaliéndose de la inexperiencia o candor del engañado."
Podemos concluir que toda persona que engañe o alucine prevaliendose de la inexperiencia o candor del tercero es entonces, un embaucador.
También podemos concluir, aunque con un poco de más suspicacia, que para que existan embaucadores deben haber inexpertos y candorosos que se dejen engañar. En otra palabras es requisito sine quoa non que exista gente inexperta y candorosa para dar cabida a los embaucadores.
Ambas calidades (inexperiencia y candor) son intrínsecas del engañado, pero ambas capaces de ser previstas y solucionadas, con la diligencia del caso. Veamos:
La inexperiencia se define como la falta de experiencia, siendo necesario entonces definir que es la experiencia: "1. f. Hecho de haber sentido, conocido o presenciado alguien algo. 2. f. Práctica prolongada que proporciona conocimiento o habilidad para hacer algo.3. f. Conocimiento de la vida adquirido por las circunstancias o situaciones vividas.4. f. Circunstancia o acontecimiento vivido por una persona.", en resumen podemos decir que es el conocimiento acumulado por la práctica o por el simple paso del tiempo y acontecimientos en una persona.
Partiendo de esa definición podríamos concluir falazmente que solo tendrá experiencia quien la haya sufrido.
Sin embargo esa conclusión no es correcta ya que podemos aprovecharnos de las experiencias de los demás mediante distintos métodos (lectura, estudio, observación, etcétera).
Ahora bien, el candor está definido como "Sinceridad, sencillez, ingenuidad y pureza del ánimo." -RAE-, siendo la acepción correcta para el caso: ingenuidad. Dicha ingenuidad está directamente ligada con la inexperiencia y la falta de astucia. Ésta cualidad (ingenuidad) es un poco más difícil de subsanar que la inexperiencia ya que está directamente relacionada con el carácter del individuo, pero dicho carácter puede ser afectado por los mismo métodos que podemos afectar la inexperiencia.
Por ejemplo: podemos ser ingenuos de nacimiento o por nuestro propio carácter, pero sabiendo y conociendo los posibles trucos de embaucamiento, podemos evitar caer en ellos. En otras palabras, debemos estudiar dichos comportamientos.
En conclusión: para ser embaucados necesitamos ser ignorantes.
La única forma de eliminar tanto la inexperiencia como la ingenuidad (candor) es aprovechar la información de la que tenemos alcance y ponerla en ejecución.
Con esto eliminaremos un alto porcentaje de ser embaucados.
It.
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